lunes, 12 de septiembre de 2011

Estampa Santaisabelina




Antes la plaza pública de Santa Isabel era un lugar donde personas que salían del trabajo se sentaban en sus banquitos bajo los árboles a coger fresco, comerse un helado, hablar con otros acerca de su día o simplemente sentarse a pensar y reflexionar.

Para el 2003 la plaza pública fue remodelada dándole un toque moderno pero sin cambiar a sus parientes inseparables: la iglesia católica, evangélica y pequeños comercios.  Los árboles que rodean la plaza y una vez fueron frondosos hoy se ven tenebrosos, flacos con ramas secas y troncos casi negros como los de la película de Tim Burton The Nightmare Before Christmas.  El color dominante que hoy tiene el lugar hace que la combinación se vea un poco lúgubre, cuando un par de años luego de la remodelación fue cambiado de un color rojo como el Parque de Bombas de Ponce a un verde limo como el de las rocas de un río.  Esta combinación de colores en los gazebos, tarima central y mesas más la decadencia de los árboles que ya ni dan la sombra acogedora que te protegía de un incandescente sol de mediodía, son parte de la razón que se suman al que el lugar no esté tan concurrido de personas como en el pasado.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

786... ¿Seguimos Contando?


"Un hombre fue asesinado", "relacionado a drogas" es lo que leemos y escuchamos repetidamente en los distintos medios noticiosos del país y en cierta manera gran parte de la sociedad ya lo va aceptando como algo cotidiano que se espera que vuelva a ocurrir.  Es ésta rutina la que nos hace olvidar a veces que no estamos exentos de éste tipo de sucesos por lo que tenemos que crear conciencia de que a cualquiera nos puede tocar en cualquier lugar, momento y por cualquier motivo, ya sea intencional o de manera casual.  Debemos preguntarnos, además de drogas, ¿qué factores son los que afectan la estabilidad mental de nuestra sociedad? cuyo índice asesinatos asciende a 786 el cual ya se superó en comparación al año pasado a esta misma fecha acorde con el periódico El Nuevo Día


Debemos considerar como uno de estos factores, la falta de empleo, lo cual puede llevar a muchas personas a cometer delitos incluyendo el de asesinato, ya que no saben como manejar su estabilidad mental y emocional ante una situación económica decayente y un gobierno que tampoco ofrece los servicios de ayuda emocional a estos. 


Además,  podría incluir el factor educación, lo cual no se debe adjudicar meramente a maestros del salón de clases, sino también a los padres quienes en conjunto con estos profesionales deben buscar la manera de volver a sensibilizar a  nuestros jóvenes con una fuerte base en valores humanos y respeto hacia la vida.   Esta insensibilidad a la cual nos referimos la vemos reflejada en el contenido audiovisual que el medio televisivo, periodístico o de internet transmite crudamente, donde es tanto el exceso de publicidad, que llega a un punto donde el buscar sobresalir del grupo es mas importante que llegar al sentimiento humano.  En ésta misma línea también tenemos los videojuegos, donde el que está detrás del control remoto tiene el papel de asesino y su meta es el matar a otros.


Tenemos que actuar rápido en todos los aspectos, ya que con la misma rapidez que la taza de asesinatos aumenta, así mismo podemos perder una futura generación de bien debido a que no sobrevivieron al presente en el que vivimos.